La temperatura se eleva sobre todo en bebés y niños pequeños debido a infecciones respiratorias como:

•Resfriado común: enfermedad infecciosa leve que afecta a las vías respiratorias superiores. Causa tos, mucosidad y obstrucción de las fosas nasales, entre otros posibles síntomas.

•Faringitis: inflamación de la faringe a causa de alguna infección vírica o bacteriana. Entre sus síntomas pueden estar el dolor de garganta, la fiebre y las molestias para tragar alimentos.

•Traqueobronquitis: inflamación de la mucosa de la tráquea y bronquios, cuadro caracterizado por la aparición de tos inicialmente seca o poco productiva, para después acompañarse de expectoración. Es muy común en fumadores y niños.

•Sinusitis: inflamación del os senos paranasales situados en las fosas nasales. Puede ser aguda o crónica. Provoca obstrucción nasal, dificultad para respirar y dolor de cabeza.

•Neumonía: enfermedad infecciosa e inflamatoria que consiste en la infección de los espacios alveolares de los pulmones.

•Amigdalitis: inflamación de las amígdalas (anginas) que se manifiesta con la presencia de dolor en la garganta y otros síntomas como fiebre. Suele deberse a infecciones víricas o bacterianas.

•Otitis: inflamación del oído producida por la presencia de algún agente infeccioso vírico o bacteriano.

•Adenitis cervical: trastorno caracterizado por la presencia de ganglios linfáticos cervicales (en el cuello) aumentados de tamaño y dolorosos.