Causas de la falta de apetito:

La falta de apetito puede ser de origen muy variada. El estrés físico y psicológico son la causa numero uno: el organismo ha llegado al límite de su capacidad de asimilación, los problemas, la soledad, los miedos y las preocupaciones nos abruman y nos quitan el apetito.

• Cuando los niños o las personas de avanzada edad no hablan de ello, la pérdida del apetito se convierte en un indicio de algún problema serio.

• Pero los desencadenantes de la inapetencia pueden ser orgánicos, como la apatía, melancolía, gastritis, un trastorno biliar o pancreático, o una enfermedad infecciosa con fiebre o diarrea.

• A veces los medicamentos caducados, los malos hábitos alimentarios, el tabaco o las bebidas alcohólicas pueden ser los causantes de la falta de apetito.

• Todo esto puede desembocar, a largo plazo, a una desnutrición o una carencia de vitaminas y minerales.

Tratamiento para la falta de apetito:

• Intente averiguar que hay detrás de su falta de apetito. Solo cuando haya resuelto los problemas psíquicos, volverá a recuperarlo.

• Reflexione sobre su modo de vida: buena parte de su estrés se debe justamente a un comportamiento irreflexivo y puede evitarse.

• Acuda a la consulta de su médico e infórmele si su estado se prolonga por más de tres días, si advierte una exagerada pérdida de peso, sobre todo tratándose de niños mayores o adolescentes (anorexia), o en caso de que observe una aversión a determinados alimentos.

• Recuerde que al ver que los síntomas se agravan debe recurrir al médico para una valoración adecuada.

• Presente las comidas de modo vistoso y apetecible. Recuerde que en la variedad esta el gusto. Los platos condimentados con hierbas aromáticas frescas abren el apetito.

• Los alimentos crudos, ensaladas, rábanos, granos de pimienta, cebolla o cebolla de cambray estimulan la formación del jugo gástrico y del apetito. La albahaca, la mejorana y la ajedrea, así como el curry, el jengibre o la cúrcuma, producen el mismo efecto.

• Evite las golosinas entre horas, en especial las bebidas dulces que quitan el apetito sin aportar nutrientes. Esto sirve de modo especial para los niños que no quieren comer.

• El ejercicio al aire libre abre el apetito.

Remedios para la falta de apetito:

• Los preparados estimulantes del apetito contienen principios amargos y aceites esenciales, que apoyan su acción.

• Los principios amargos estimulan las células gustativas de la lengua, encargadas de transmitir mensajes al cerebro para la formación de la saliva y del jugo gástrico, que se intensifica luego, cuando al estómago llegan los principios amargos.

Prepare un té ya sea solo o combinado:

• En la composición de los principios amargos figuran: raíz de genciana, piel de naranja, hierba de ajenjo, hierba de cardo lechero, corteza de condurango y corteza de quina.