A día de hoy, las mujeres no solo fuman más que los hombres, sino que empiezan con este nocivo hábito antes. Los estudios epidemiológicos apuntan que el 50 por ciento de los jóvenes entre 16 y 18 años fuman regularmente y que las mujeres lo hacen en mayor proporción y a edades inferiores (a partir de los 12 años).

Y todo ello a pesar de saber que el consumo de tabaco aumenta la incidencia y la mortalidad de las enfermedades cardiovasculares en la mujer.

¿Se puede fumar y tomar anticonceptivos?

• En el caso de la mujer hay, además, una peculiaridad muy a tener en cuenta: la unión de tabaco y anticonceptivos multiplica por 30 el riesgo de trombosis (coágulos que se forman y viajan por todo nuestro organismo).

• Asimismo las pastillas anticonceptivas y el tabaquismo juntos pueden generar enfermedades cardiovasculares, ya sea hipertensión, hipocolesterolemia, angina de pecho o infarto.

• Se establece que el riesgo de infarto en una mujer fumadora es de cuatro a seis veces mayor que en las mujeres no fumadoras, y además se mantiene hasta tres años después de haber dejado de fumar.

• Toda mujer mayor de 35 años que fuman y toman pastillas tiene más riesgo de adquirir algunas de estas enfermedades.

• Si te gusta fumar, no dejes de comunicárselo al ginecólogo: podría necesitar otro método anticonceptivo.

Cuídate como mujer:

• Dejar de fumar, sin duda, es una de las decisiones más inteligentes que una mujer puede tomar respecto a su salud presente y futura.

• Entre los argumentos, de sobra conocidos, en contra del tabaco, se destaca el efecto que ejerce sobre quienes rodean al fumador (están documentadas las consecuencias perniciosas para la salud de los fumadores pasivos) y, en el caso de la mujer, el empeoramiento de la salud del feto si ésta fuma durante el embarazo.