Por lo general, el sangrado de las encías después y durante el cepillado se debe a un problema con la placa bacteriana. Es importante por ello que no dejes de cepillarte las encías además de los dientes, pues hay que remover esa placa. • La clave esta en cepillarlas con el cepillo adecuado. Si este es excesivamente duro, notaremos dolor y dañaremos la mucosa.
• Existen varios tipos de cepillos, desde muy suaves hasta duros. Tendrá que probar para ver cual es el que mejor se adapta a sus encías.
Para los niños, siempre los mas blandos.
• Un colutorio dental después del cepillado, aunque no es imprescindible, puede complementar el tratamiento contra la placa, evitar la halitosis (mal olor de boca) y refrescar. Además, algunos llevan componentes como el flúor, muy necesario para los niños.