Es usual entre los más jóvenes, debido a lo corto que parecieran las vacaciones, y si a esto se le añade alguna salida a un destino inolvidable, el sentimiento de no querer que terminen las vacaciones se incrementa.
Pero es solo pasajero, porque una vez integrándose a su vida cotidiana, dicha depresión se desvanece.
Anuncios:
Consideraciones respecto a la depresión post vacaciones de semana santa:
• La semana santa es considerada en la mayor parte de países como la fecha en que fue crucificado Jesucristo, por lo cual se le considera sagrada. Para muchas familias, se le considera una semana dedicada a la reflexión y al autoanálisis.
• Pero para los jóvenes significa más bien un tiempo para festejar lejos de la escuela, del trabajo y hasta de la familia.
• Lo cierto es que es un tiempo para convivir con la familia, sobre todo si por circunstancias variadas, se encuentran lejos.
• Las vacaciones de semana santa tienen distintos fines, mientras para unos es diversión, para otros es meditación.
• De cualquier modo, nadie se quiere perder dicho periodo, por lo que significa, así que una vez terminado el periodo vacacional, solo quedan los recuerdos de lo vivido, y los deseos porque no terminen.
• Para personas sensibles, la depresión que viene tras el fin de las vacaciones, puede ser alentada por el deseo de que no termine un buen periodo, una visita con familiares a quien no frecuenta, o simplemente la convivencia inigualables con la familia.
¿Cómo podemos evitar la depresión post Semana Santa?
• Mentalizarse que las vacaciones solo duran unos días.
• Hacerse la idea de que después de vacacionar hay que trabajar (mucha gente está sin trabajo y desearían el puesto de quienes tienen trabajo). La depresión post semana santa se soluciona al paso de los días, integrándose a la actividad cotidiana con todas las fuerzas posibles.