Lejos del argumento moral si es bueno o malo, se encuentra lo ético de si es o no correcto, dándose entonces el caso que no es menester por razones de sana convivencia. Además, pasarse sentado mucho tiempo en el baño provoca las llamadas “piernas dormidas”.

Y es que el baño es tan indispensable como cualquier otro rincón del hogar o del trabajo, e incluso hay momentos en que es sumamente necesario, esto debido a las necesidades fisiológicas (y saludables) que cada persona debe utilizar al menos una vez al día.

Suponiendo que en el hogar solo se cuente con un baño, y la persona que lo esté ocupando haga más tiempo por estar leyendo, es una auténtica falta de respeto y violación del derecho de los demás por utilizar el sanitario.


En el trabajo no es la excepción, solo que ahí si es sancionado, porque el leer en el baño es considerado perder el tiempo en horas hábiles, esto sin contar la mala imagen que se forma con los compañeros de trabajo, pues aparenta ser alguien que gusta de perder su tiempo y hacérselo perder a los demás.

Otros motivos para considerar inapropiado y porque no se debe leer en el baño:

• Se considera una falta de respeto y una imprudencia quedarse tanto tiempo en el baño, sobre todo si se considera que para realizar una evacuación solo se requiere de unos minutos y no de media hora o más.

• Hay baños para todos los presupuestos, así se pueden contar los que son hechos de madera, de ladrillo, block hasta los más humildes hechos con hojas, ramas y láminas de cartón, sin embargo su fin es el mismo y una persona que se tarda demasiado utilizándolo por estar leyendo, causa el mismo efecto de molestia.

• Presentarse como una persona incoherente que lee en un sitio que no corresponde, pues para ello se encuentra el confort de una biblioteca o sala de lectura, y no la taza del baño.