La temperatura corporal nos permite evaluar la eficiencia del control térmico que se presenta en nuestro cuerpo, el funciona de acuerdo a los cambios en la temperatura ambiental y la intensidad de la actividad que se realiza. Es decir la temperatura, también, depende del ambiente y de la actividad física.
Lo normal en la temperatura corporal es cerca de los 37 °C ó 98,6 °F, como ya mencionamos, ésta temperatura corporal es la temperatura interna de nuestro cuerpo, la debe de mantenerse para asegurar que las funciones vitales se desarrollen de manera estable, esto incluye el buen funcionamiento del cerebro, los órganos internos y las arterias principales.
La temperatura puede variar dependiendo de la edad y también influye el ambiente, por ejemplo por las mañanas es baja la temperatura del cuerpo, un poco más alta por la tarde y ligeramente inferior por las noches.
• En el caso de frio puede provocar hipotermia, que es un estado peligroso y anormal, ya que nuestra temperatura desciende por debajo de los 35 °C, debido a una exposición prolongada al frío.
• En tanto caso contrario, con el calor cuando nuestra temperatura corporal está en los 41 °C, nuestras células se lesionan y si la temperatura alcanza los 42 °C nuestras células mueren por la coagulación de sus proteínas, esto hace que tengamos sed, la cual es una sensación que aparece cuando nuestro ha perdido entre el 1% y el 3% del peso corporal en líquidos, provocando una deshidratación.
Es por ello importante mantener constante la temperatura corporal, en el caso de exposición prolongada en el frío debemos abrigarnos bien, usar ropa impermeable y rompeviento, así como utilizar guantes, bufanda y gorro que cubra nuestras orejas, y por el contrario en una exposición prolongada en el calor, tomar agua o chupar cubos de hielo, consumir bebidas con electrolitos y fruta rica en agua.
Evite estar mucho tiempo expuesto en ambos climas (frio, calor), de este modo podrá mantenerse de forma constante su temperatura corporal.