Estenosis:
• En medicina, estenosis se refiere a la estrechez de un conducto o de un orificio condicionada por factores diversos.
• Puede ser la consecuencia de fenómenos de naturaleza malformativa, y en este caso se presenta como una enfermedad congénita, o bien tener su origen en procesos adquiridos de tipo inflamatorio o neoplásico.
La estenosis puede afectar todos los órganos formados por conductos, tanto hemáticos como aéreos o alimenticios, y siempre va acompañada de un aumento progresivo y de la canalización del órgano afectado y de un aumento de la opresión en los sectores ascendentes respecto del punto estenótico.
Tipos de estenosis:
• Las estenosis del aparato cardiovascular son bastante frecuentes y pueden ser de naturaleza congénita (estenosis aórtica) o adquirida (estenosis mitrálica y mitraórtica postraumática).
• Otros tipos de estenosis vasculares (arteriales) son aquellas que se instauran en el caso de graves fenómenos arterioscleróticos y endoarteríticos. A este propósito se pueden recordar las graves consecuencias que se presentan en los órganos y en los tejidos afectados por la estenosis de las arterias nutritivas: en primer lugar cabe citar las necrosis colicuativas del sistema nervioso central (reblandecimientos cerebrales) por reducción del aflujo hemático en la región de las arterias que parten de la cerebral media, que es la más comprometida en orden de frecuencia. También merecen ser tenidos en cuenta los fenómenos de dolor por isquemia, a cargo de las extremidades inferiores, por estenosis de las arterias femorales, poplíteas y del pie.
• Un grupo particular lo constituyen las estenosis coronarias, con sus consecuentes necrosis, isquémicas coagulativas; estas graves afecciones entran dentro del vasto cuadro del infarto.
• Las estenosis de las vías aéreas son asimismo frecuentes; suelen ser de carácter adquirido, aunque se dan casos atribuibles a una patogenia malformativa. A este respecto se pueden tener presentes tanto las neoplasias vegetativas e infiltrantes de origen bronquial como las abundantes deposiciones de materia mucopurulenta en las bronquitis crónicas, fenómenos todos ellos que condicionan una lenta reabsorción de aire en las cavidades alveolares, con atelectasia pulmonar.
• La estenosis del tubo digestivo puede convertirse, en la inmensa mayoría de los casos, en neoplasias epiteliales que, vegetando en el conducto o infiltrándose en su pared, degeneran en suboclusión del mismo órgano. Particularmente temibles son las complicaciones de estas neoplasias, vinculadas a procesos perforantes y relacionadas, por lo tanto, con peritonitis que a menudo son de carácter purulento.
• Existen otros casos de estenosis que interesan órganos de importancia vital, como las vías urinarias y las vías biliares. En el primer caso, la patogenia es muy variada y comprende, entre otras formas, la calculosis, los tumores benignos y malignos de la próstata y del útero y las neoplasias vegetantes (pailomas) de la pelvis, del uréter y de la vejiga; análoga patogenia presentan las estenosis a cargo de las vías biliares, asimilables a casos de calculosis y de patología neoplásica. A la retención de orina y de bilis se agregan, con el tiempo, graves fenómenos flogísticos que, en el caso de las vías urinarias, determinan la aparición de temibles casos de pielonefritis, los cuales, con la consiguiente destrucción de amplias zonas parenquimales, se consideran entre las más frecuentes causas de constricción del y de hipertensión.