Por herencia, por la falta de ejercicio pero sobre todo por la mala alimentación, basada en productos poco o nada nutritivos, pero llenos de calorías.
Asimismo, la predisposición propia de cada persona es la que provoca que aumente de peso, en ocasiones de manera drástica. El embarazo, suele ser otro factor en el que muchas mujeres después de dar a luz, ya no recuperan su peso anterior.
Independientemente de la herencia, estudios han llegado a la conclusión que una persona engorda por:
1. 70% mala alimentación.
2. 30% falta de ejercicio y sedentarismo.
Consideraciones de porque la preferencia a engordar:
1.Mala alimentación:
• El comer en demasía alimentos con mucha grasa, mucha azúcar o demasiada harina (pizza, hamburguesas, maruchan, tortas preparadas, tamales, taquitos dorados, pollo frito, tacos de carnitas…).
• Beber poca agua (1 vaso al día), o consumir solo agua con saborizante o refrescos.
• Consumir regularmente comida chatarra e incluso llegar al punto de ponerla encima de la comida realmente nutritiva y saludable.
2.- Falta de ejercicio:
• Salir poco a caminar o utilizar solamente el auto, aun para trayectos cortos.
• Pasar mucho tiempo sentado, ya sea viendo televisión, computadora u algún otro dispositivo electrónico.
• Permanecer poco tiempo haciendo ejercicio o no ejercitarse nunca.
• Llevar una vida sedentaria.
Otras causas:
• Herencia familiar, lo cual en ocasiones resulta en un conflicto consigo mismo.
• Consumir alcohol en exceso, aquí no solamente afecta otros órganos del cuerpo sino también fomenta una hinchazón corporal.
• Por embarazo. Durante el embarazo, procure tomar mucha agua, hacer ejercicio (pregunte a su médico), comer sanamente, evitar la comida grasosa y calórica (los antojos a veces son pretexto), tome medidas para que después no se arrepienta de que engordo. Consulte a un médico cual es la mejor forma más saludable de sobrellevar un embarazo.