La miel es un producto natural que elaboran las abejas a partir de los néctares que obtienen de las flores. Está formada por cerca de 100 elementos, en su mayoría azúcares, proteínas, sales minerales, vitaminas del grupo B (que proceden del polen), sustancias nitrogenadas y agua.
La miel protege el aparato digestivo:
• Sus inhibinas desarrollan una acción antibiótica, que destruye las bacterias nocivas en el estómago y en el intestino, entre ellas las que provocan las úlceras gastrointestinales.
• Equilibra la flora intestinal.
• Asimismo, incrementa la secreción de los jugos gástricos para mejorar los casos de dispepsia o acidez.
• Tomar una cucharada de miel en las mañanas, dejándola diluir bien en la boca y esperar al menos una hora antes de ingerir cualquier otro alimento ayuda a quienes sufren de úlcera gástrica.
Para todo lo anterior, se recomienda tomar de 1 a 2 cucharadas soperas de miel todos los días.