La fitoterapia ayuda a mejorar y aliviar dolencias típicas durante el embarazo.
Fitoterapia para embarazadas:

• La manzanilla también se recomienda para las nausea mañaneras.
• La equinácea, en cualquiera de sus versiones, resulta excelente para prevenir y combatir gripes y catarros, ya que aumenta las defensas del organismo frente a virus y bacterias.
• El regaliz ayuda en casos de estreñimiento o hemorroides.
• La menta es un estupendo tónico estomacal y un perfecto sustituto del café.
• La camomila facilita la digestión y actúa como relajante.
• La infusión de hojas de frambueso es rica en calcio y magnesio, por lo que tiene un efecto relajante sobre huesos y músculos (con lo que alivia los calambres); ejerce una acción calmante sobre las náuseas y, después del parto favorece la producción de leche.
• Para dormir tome una infusión de manzanilla o de tila o de lavanda.
Nota importante:
• No son recomendables el perejil o la salvia, cuyos efectos en el embarazo aún no están comprobados.
• Otra de las plantas con las que hay que tener cuidado es la valeriana: tomarla en exceso puede inducir un estado de tranquilidad excesiva en el feto. Lo mejor es optar por la melisa, más segura y suave.
• Recuerde: antes de tomar algún remedio consulte a su médico.