En primer lugar dará lugar a enfermedades de tipo infeccioso debido a la mala higiene, y en segundo lugar afectara el aspecto personal.

La higiene es tan importante como comer, beber o dormir, sin esta no se puede vivir plenamente, es un aspecto tan importante para la persona, que si esta falta aparece una gran gama de afecciones que tienen que ver directamente con su ausencia.

Cuando una persona es sucia en su aseo personal que no gusta de lavarse frecuentemente, el sudor y los olores corporales harán que despida un aroma poco deseable y muy rechazable, razón suficiente para que las personas que le rodean guarden cierta distancia.

El cuerpo debe ser aseado, lavado y acicalado frecuentemente, máxime cuando la actividad diaria provoca que se presente el sudor, mal aliento y suciedad en partes íntimas.

Algunas consecuencias por no una buena higiene personal:

• Granitos y ronchas.

• Oler mal, el sudor despide un penetrante y desagradable aroma mismo que es inconfundible y que denuncia al que lo porta como una persona desaseada.

• Mal aliento, el no lavarse los dientes, provoca que estos se llenen de caries, pero además que despida un feo olor, el cual hace imposible llegar a algún acuerdo con quien lo porta, pues es imposible entablar una charla por el repulsivo olor que despide al hablar.

• Pies olorosos, el inconfundible y nauseabundo olor a pies sudados es verdaderamente vergonzoso, porque hace notar que quien lo tiene, no se lava los pies con frecuencia y que además tiene algún padecimiento en los pies el cual le hace tener tan mal olor.

• Aspecto desaliñado, el observar a alguien que no se ha bañado, mal vestido y por si fuera poco oloroso, es un espectáculo incomodo, pero sobre todo, poco agradable.