La retención de líquidos es un trastorno metabólico que se caracteriza por la acumulación de agua u otras substancias en el cuerpo. Para evitar una retención de líquidos no severa o patológica, se recomienda que haga lo siguiente.

¿Qué hacer?

• Tome entre 1.5 a 2 litros de agua al día.

• Siga una dieta baja en sodio. Este es un elemento que se encuentra en todos los alimentos aunque como la sal de mesa es la principal fuente, lo primero que tiene que hacer es reducir la ingesta de esta en las comidas, así como también en el caso de otras fuentes de sodio como: embutidos, conservas, quesos (salvo los quesos sin sal), ahumados, pan con sal, pastillas de caldo, sopas y purés comerciales, aguas minerales con gas, alcohol, etc.

• Asimismo, incluya en su dieta verduras, hortalizas, frutas, legumbres, carbohidratos no complejos y alimentos ricos en potasio en general (legumbres, frutos secos, frutas y verduras).

• Realice ejercicio por lo menos 30 minutos diarios.

• Tome un té de cola de caballo o de diente de león o de pelo de elote.


Nota: Acuda con un médico.