La miel de abeja es un alimento energético gracias a sus hidratos de carbono procedentes de sus azúcares simples: 38% de fructosa, 32% de glucosa, 5% de sacarosa, 7% de maltosa y el resto de isomaltosa, erlosa, rafinosa y otros.
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"Pero no solo la miel aporta energía, sino también nutrientes tales como minerales: potasio, calcio, hierro, fósforo, magnesio, manganeso y cobre; vitaminas: B2, B3, B5, B6, B9 y C. ideal para deportistas, para ir a la escuela, para ir al trabajo, para adultos mayores…"
La miel de abeja es un alimento energético gracias a sus hidratos de carbono procedentes de sus azúcares simples…
Consumir miel nos ayuda a:
- Fortalecer nuestras defensas.
- Tener una buena digestión.
- Combatir y prevenir resfriados.
- Combatir el colesterol malo (LDL).
- Mejorar la condición de la piel, pues evita el envejecimiento prematuro.
- Mejorar la memoria.
- También es antioxidante, anticancerígeno, antiinflamatorio, antiséptico…
¿Cuánta miel debo tomar al día?
- Los especialistas recomiendan tomar de 2 a 3 cucharadas soperas.
- O bien de 50 a 100 gramos diarios.
Algunas aplicaciones externas de la miel:
- Como pasta como fortalecedora del cuero cabelludo.
- Si la aplicas en picaduras de insectos e hinchazones causadas por golpes y te aliviará todo malestar que puedas sentir.
- Promueve un ambiente húmedo que permite que la piel crezca a través de heridas sin la formación de una cicatriz.
- Una propiedad plenamente reconocida de la miel es su poder antiséptico, que unido a su poder de ablandamiento, hacen de ella un excelente cicatrizante y protector de la piel, siendo muy empleada tópicamente en quemaduras, heridas y grietas, con excelentes resultados.
- La miel también actúa como desinfectante, matando a las bacterias que pueden infectar heridas.