Se ha publicado una serie de resultados de estudios realizados a lo largo de los últimos 20 años, en donde un grupo de investigadores sugiere que ciertas cepas de virus, como los que causan los resfriados y la conjuntivitis, hacen que los individuos infectados fabriquen más células grasas.
La fisióloga Lea Whingham, de la Universidad de Wisconsin Madison, y su equipo hicieron el siguiente experimento.
Virus que provoca obesidad:
• Se inocularon tres cadenas de virus distintos (Ad-2, Ad-31 y Ad-37) a pollos machos.
• Hicieron un seguimiento de ellos durante tres semanas y media, y analizaron la comida que ingirieron durante ese tiempo.
• Los pollos portadores del virus tenían casi tres veces más de grasa en el intestino que los que no habían sido infectados, a pesar de que los pollos infectados y los no infectados consumían la misma cantidad de comida y estaban expuestos a las mismas condiciones.
• Al final del estudio, los pollos portadores del Ad-37 tenían casi tres veces más grasa en el intestino y más de dos veces en el total del cuerpo que los no infectados.
• Las otras dos cepas demostraron tener poco efecto sobre el peso.
Lo que aún falta por descubrir es el mecanismo por el que estos virus desarrollan la obesidad, para así poder proveer a la gente de una vacuna que prevenga contra los problemas que ocasionan dichos virus.