Seguramente ya tienes implementada tu dieta para bajar de peso, ahora a llegado la hora de añadir un ingrediente secreto a tu plan adelgazador, el cual va a darle un enorme impulso a tu capacidad para deshacer la grasa.
• El truco es incrementar tu índice metabólico; es decir, la velocidad con la que tu cuerpo usa la energía que obtiene de los alimentos.
Consejos para acelerar tu metabolismo
Reajusta tu método de ejercicios
• Llevas siglos realizando la misma rutina de ejercicios. Si es este el caso, tus músculos se han acostumbrado tanto a esos movimientos, que pueden repetirlos sin ningún esfuerzo.
• Añade nuevos ejercicios o actividades a tu repertorio, de esta forma obligaras a tu cuerpo a trabajar más duro para ejecutarlos, lo que a su vez le dara un impulso a tu metabolismo.
• Sustituye tus caminatas en la estera por la bicicleta estacionaria, por ejemplo
Consume mucha proteína
• Reduce un poco los carbohidratos en tu comida y eleva la proteína. Y la verdad es que da resultado si lo haces prudentemente.
• Reemplazar los carbohidratos refinados, como las papitas y galletitas sin grasa por proteína, como las carnes magras, pescado, soya y otros frijoles. Te ayudaran a bajar de peso.
• La composición de la proteína es más compleja que la de los carbohidratos, de modo que el sistema digestivo requiere más energía para procesarla.
• Pero no consumas demasiada proteína. Los expertos recomiendan limitarla al 15 ó 20% de tu dieta diaria.
Aumenta tu masa muscular
• Mientras más músculo tengas, más calorías quemaras, lo mismo sucede si estas ejercitándote que si te quedas sentada en el sofá mirando la tv.
• Un estudio revelo que puedes experimentar un aceleramiento temporal tras una sola sesión de ejercicios con pesas (el International Jornal of Sport Nutrition) en el que participaron mujeres, arrojo como resultado que tras una sola sesión de ejercicios de levantamiento de pesas el metabolismo de las participantes se acelero, lo0 que da por resultado que una barra de chocolate ese mismo día la quemaron con más rapidez que el día anterior que no hicieron ejercicio.
Muévete a cada rato
• Añade cualquier actividad física que no sea parte de tu rutina, hasta las más insignificantes puede ayudarte a quemar calorías.
• En un estudio realizado en una clínica donde todos los participantes ingirieron 1.000 calorías extra al día durante ocho semanas, solo algunos subieron de peso. Los que no engordaron tenían algo en común: eran inquietos. Este impacto que tienen los movimientos mínimos en tu capacidad para quemar calorías puede verse en tu cintura. Por ejemplo: cambiar el peso de tu cuerpo de un pie a otro mientras te cepillas los dientes quema 3,1 calorías por minuto en alguien que pesa 69 kilos; mover en círculos el ratón de la computadora quema 1,5 calorías; y así sucesivamente.
Limita tu consumo de alcohol
• Cuando se bebe alcohol, la grasa se acumula en el hígado en vez de trasladarse al cuerpo para utilizarla como energía.
• Si el cuerpo se retrasa en eliminar la grasa, es probable que se acumule, no que se queme.
• Limita tu consumo a un trago diario lo que quiere decir: 12 onzas (354 ml) de cerveza; 5 onzas (147 ml) de vino 01,5 oz. (44 ml) de licor fuerte. Y no: no puedes reservarlo todo para bebértelo de una sola vez el fin de semana.
• Aun sí lo mejor es no tomar.
Incrementa velocidad a tus rutinas de ejercicios
• El ejercicio con algunos intervalos de mayor velocidad acelera el metabolismo
• Mientras corres o caminas en la estera a tu paso normal, intercala de vez en cuando dos o tres minutos de mayor intensidad, y luego vuelve a tu ritmo habitual. De esta forma, tu cuerpo trabaja más en menos tiempo.
Acostúmbrate a las minicomidas
• Reparte tu consumo normal de calorías en comidas más ligeras y frecuentes, cada tres o cuatro horas mantiene funcionando a más velocidad el carburador de tu cuerpo.
• El simple acto de comer acelera el metabolismo porque el cuerpo quema calorías al digerir.
• Además, así puedes controlar mejor tu apetito.
Duerme lo necesario
• Si estas cansada, tu cuerpo no tendrá la energía suficiente para realizar sus funciones normales, incluyendo la de quemar calorías eficazmente.
• Un estudio desarrollado en la Universidad de Chicago demostró que cuando los participantes reducían de ocho a cuatro sus horas de sueño, la capacidad de sus cuerpos para procesar los carbohidratos se afectaba; es decir, era más probable que acumularan grasa.
• La mayoría de las personas no duermen suficiente. Para que tu cuerpo funcione al máximo, necesitas estar bien descansada. La mayoría de los médicos recomiendan dormir como mínimo 8 horas diarias.
Disfruta el café
• La cafeína estimula el metabolismo.
• En un estudio llevado a cabo (el International Jon real of Sport Nutrition and Exercise Metabolism) nos revela que los participantes quemaron calorías con más rapidez durante la hora después de haber bebido una taza de café, tal vez debido al ligero efecto térmico de la cafeína.
• Pero no exageres: los expertos aconsejan limitar el consumo a dos o tres tazas al día.
Principia temprano
• Si realizas tus ejercicios como primera actividad de la mañana, harás que tu cuerpo queme más calorías.
• Al despertarte, el ritmo de tu corazón esta en su punto más bajo del día. Y como necesitaras esforzarte más para llegar al número de palpitaciones que habitualmente alcanzas durante el ejercicio, quemaras más calorías en el proceso.
Toma mucha agua
• Todos los órganos, desde el cerebro hasta el hígado y los riñones necesitan agua para funcionar.
• Un cuerpo deshidratado no descompone la grasa con rapidez
• Cuando tu cuerpo se deshidrata, la sangre fluye más lentamente y esto significa que no podrá enviar rápidamente hacia los músculos las sustancias nutritivas y la energía (las calorías) que obtiene de los alimentos.